Existen principios básicos para preparar té como un experto y poder disfrutar de lo mejor que esta infusión. Generalmente estamos acostumbrados a preparar té de sobres porque es «más rápido» o «más cómodo», con este té no hay muchas vueltas, se siguen las indicaciones del fabricante ¡y listo! Sin embargo, cuando nos adentramos en el mundo del té en hebras, la cosa cambia: encontramos muchos consejos, por lo general, dispares. Trataré de simplificar el proceso en 5 puntos.
1 Elegir la vajilla correcta
Es importante elegir una taza y dejarla solamente para tu té favorito porque si preparamos café en esa misma taza, los aromas fuertes del café se quedan impregnados en ella e interfieren cuando preparamos el té. También es ideal tener una pequeña tetera personal.
2 Té en saquitos vs té en hebras enteras
En general usamos sobres de té porque nos parecen más fáciles de usar. Pero la verdad es que, en la práctica, usar té en hebras es igual de rápido y nos da un té de mayor calidad. Poner una cucharada de té y verter agua caliente encima es igual de rápido que calentar el agua en el microondas y echarle un sobrecito. Pero el té en hebras es diferente. La oxidación, secado y enrollado de las hojas de té hace que mantengan su color, aroma y sabor. Al infusionarse, se rehidratan y el agua extrae todas sus propiedades. Además, según el té, puede volver a infusionarse, algunos hasta 5 veces. Los tés complejos cambian sus matices en cada infusionado. En conclusión, es un error creer que un té en hebras es más caro que un té en saquitos. Primero la calidad es mayor, segundo, se puede infusionar varias veces.
3 La calidad del agua y su temperatura
El agua hace un 80% del té y es la base para sentir la pureza de los sabores de la infusión. Se recomienda evitar el agua de canilla por el cloro y usar agua filtrada o mineral. Lo ideal es que no hierva, hay que evitar calentar agua sobrante por segunda vez porque cambia su química y esto le da un sabor que predomina sobre la infusión. Para calentar el agua, es ideal un calentador eléctrico con control de temperatura. Existen programables para calentar el agua a la tempera- tura exacta de acuerdo al tipo de té. Evitemos calentar el agua en el microondas porque también cambia su sabor. Los dispenser calientan el agua a 85oC, apropiado para diferentes infusiones. La temperatura correcta del agua evita que las hebras se quemen o tengan un sabor amargo como pasa con el té verde. También se puede usar un termómetro culinario o medir a "ojímetro".
4 Tiempos de infusión
Los tés con oxidación elevada (oolong y negro) necesitan tiempos de infusión superiores a los verdes.
Té negro, temperatura 95°C, tiempo de infusión 3 a 5 minutos.
Té oolong temperatura 85°C, tiempo de infusión de 3 a 5 minutos.
Té verde temperatura 75°C tiempo de infusión de 2 y 3 minutos.
Té blanco temperatura 65°C, tiempo de infusión 3 a 5 minutos.
El pu-ehr fermentado, 95°C, tiempo de infusión 4 a 6 minutos.
El pu-ehr no fermentado 95°C, tiempo de infusión 2 a 3 minutos.
Infusiones herbales o frutales, 100°C y tiempo de infusión 5 minutos.
5 Leche y azúcar
Cuando las agregamos al té, o cualquier otra cosa, afectamos su sabor final. Endulzar un té no permite apreciar su astringencia, y la leche enmascara sus notas frutales, herbales y tostados. Recomiendo aprender a tomar sin agregar nada.