Este tradicional trago chileno lleva su nombre porque fue creado después del gran terremoto que sacudió a Chile en 1985. Según cuenta la historia, un periodista alemán que cubría los hechos, luego de tomar este refrescante trago de manera presurosa para calmar la sed, exclamó en su mal español y acento germano: ¡Esto sí que es un terremoto!
Vino blanco o vino pipeño (receta original).
Helado de piña.
Fernet o licor amargo.
Granadina (en algunos casos en vez del licor
amargo)
En un vaso mediano echamos una buena bocha del helado
Agregamos el Vino Blanco hasta llenar el vaso
Le damos un chorrito del amargo o granadina
Revolvemos y tenemos un Terremoto