Para preparar Caipiriña se necesita un ingrediente original de Brasil, la cachaça. El origen de este “ron” brasilero, se remonta a la época de la esclavitud en Brasil. En las haciendas de “Cana de Açúcar” se obtenían muchos subproductos de la caña de azúcar, uno de los más apreciados era la miel. Para obtener la miel de caña, los esclavos hervían al fuego, en grandes sartenes, el jugo de la caña de azúcar sin dejar de revolverlo hasta obtener una mezcla cremosa. Un día algunos esclavos cansados de tanto mezclar el jugo, dejaron que hirviera sin revolverlo ¡y la melaza se cortó!  Para evitar el castigo, mezclaron la melaza agria con una nueva y llevaron la mezcla al fuego. Resultado: la melaza ‘agria’ era alcohol, de la fermentación del azúcar y al calentarla se evaporó lentamente, se condensó en el techo y provocó un goteo constante. Cuando las gotas caían sobre la espalda de los esclavos marcadas por el látigo de sus supervisores, quemaban y así las llamaron ‘agua ardiente’.

A esta interesante historia mezclale (en una licuadora) ½ litro de agua ardiente, 400g de frutilla, 80g de azúcar, 20g de  jengibre rallado ¡y vas a obtener diversión garantizada!