Nuestra desmedida devoción por los volcanes, decadencias y delirios de chocolate, se encuentra con un shot de espresso extra power. Chococafeinómano, estamos creando un nuevo trastorno compulsivo.
100 cc Agua
150 g Azúcar
50 g Glucosa
180 g Claras
250 g Chocolate semiamargo
120 g Manteca
200 g Crema de leche
100 g Yemas
320 g Azúcar impalpable
60 g Harina
200 g Harina de almendras
300 g Manteca
300 g Cobertura semiamarga
450 g Claras
1 u Espresso bien fuerte
Derretir el chocolate a baño maría, o en el microondas, revolviendo cada 30 segundos.
Incorporar la manteca pomada. Entibiar a temperatura ambiente y reservar.
Elaborar un merengue italiano. Para eso, en una cacerolita, colocar el agua con el azúcar y la glucosa y hacer un almíbar a 120 grados.
Por otro lado, batir las claras con una cucharada de azúcar. Cuando espume, incorporar el almíbar en forma de hilo. Continuar batiendo hasta que entibie el merengue.
Batir la media a medio punto y reservar. Unir el merengue con la crema de chocolate. Por último, añadir la crema batida.
Batir las yemas con el azúcar a punto letra.
Por otro lado, derretir a baño maría la cobertura de chocolate semiamargo con la manteca hasta unir completamente, también el espresso.
Agregar a las yemas la mezcla de chocolate, luego incorporar los secos (harina y harina de almendras).
Batir las claras a punto nieve e incorporar en forma envolvente a la mezcla.
Colocar en un molde circular y llevar a horno a 180 grados por 30 minutos.
Armado: una vez que se enfríe la base, colocar la mousse sobre la torta y dejar enfriar en el freezer. Desmoldar. Se puede acompañar con una salsa de frambuesa o una ganache de chocolate.