En plena autopista, cerca del aeropuerto, surgió hace poco una nueva opción para los luqueños que son cada vez más y que están cada vez más cansados de tener que venir hasta Asunción en busca de una noche entretenida. Se trata de Los 10 Más, cuyo slogan es “comida confortable”. Todos crecimos con sabores con los cuales sabemos que estaremos bien. El puré de papas de la abuela o la hamburguesa casera del tío nos llevan a ese lugar grato de la infancia, a la mesa familiar donde uno “se halla”, como se dice aquí en Paraguay. Este es el sentido del slogan, un espacio que busca rescatar esas recetas sencillas y ricas de las que sabemos qué esperar. A partir de este criterio nace el nombre del restaurante, ya que la carta en su totalidad es un ranking de los diez platos favoritos de los clientes del local.

En el área de bebidas, la política es no tener convenios de exclusividad con ninguna marca, ni producto, para que los clientes sean realmente quienes decidan cuál será la oferta de bebidas. Sin importar el nombre, o lo grande de una marca, si el cliente no la elige, hasta ahí llegó. La intención es relacionar al comensal con el local de forma interactiva y dinámica, y que el comensal sea parte fundamental de Los 10 Más, porque su opinión es lo más importante. El menú completo está basado en este concepto. Cada mes, se presenta una lista de sugerencias y dependiendo de la acogida entre el público, algunos platos entran entre los diez platos que se colocarán en la carta del siguiente mes. Si un plato dejó de pedirse, se retira. El objetivo es que las sugerencias vengan de los clientes mismos, quienes pueden manifestar sus recomendaciones llenando un formulario que se encuentra en cada mesa.

De esta manera se logra un menú especial, que tiene cuatro secciones: Entradas; Sándwiches y hamburguesas; Comidas hechas en tatacuá y Platos de fondo, para quienes tengan más hambre. Todas las secciones tienen diez propuestas que varían cada mes.

Lo que no cambia es la atención tremendamente cordial, la vajilla de colores y los pancitos que ponen en la mesa para abrir el apetito acompañados de tres salsas caseras (tártara, pesto y ajo). Los panes, horneados en el mismo local, son crocantes por fuera y suaves por dentro. Las estrellas de la casa son definitivamente las pizzas y los calzones hechos en el horno de barro. Un recomendado especial sería el Calzone Napolitano (G 62.000), suficientemente grande como para llenar tres estómagos. Con un sabor ligeramente ahumado y muchísimo queso mozzarella acompañado de morrones, aceitunas, tomates y una reducción de vino blanco. Si vas en plan romántico, una buena idea son los platos fuertes, cuyo segundo lugar está ocupado por los Gnocchis de la Cigüeña (G 47.000). Son artesanales y vienen en salsa de crema con pollo y champiñón. Punto de encuentro obligado para luqueños y asuncenos que buscan algo nuevo.