El sándwich japonés de chuleta de cerdo frito es un misterio difícil de encontrar fuera de Japón. La chuleta es la puerta de entrada. En primer lugar, se trata de carne de cerdo. Grasa jugosa y sabrosa. Un punto de partida perfecto para este emparedado que sigue con la suavidad del pan. El sabor crujiente y jugoso de la carne combinado con la salsa crean una experiencia perfecta para el paladar.
5 u Huevos
290 g Azúcar
7 cdas Agua
340 g Chocolate semiamargo
230 g Manteca
c/n Esencia vainilla
120 g Castañas tostadas
20 Canela
90 g Yemas
90 g Azúcar
50 ml Vino Tinto
60 g Chocolate semiamargo
Batir los huevos con una parte del azúcar a punto letra, preparar un almíbar con la otra parte del azúcar y las 7 cucharadas de agua. Agregar en forma de hilo al batido de los huevos.
Fundir el chocolate y la manteca a baño maría. En un bol mezclar con el batido de huevos y agregar la canela, las castañas tostadas previamente y la esencia de vainilla.
Mezclar todo muy bien. Volcar en un molde cubierto con papel manteca. Cubrir con papel aluminio y hornear a baja temperatura aproximadamente una hora. ¡Enfriar y reservar!
En un bol, colocar el vino tinto y las yemas. Mientras se comienza a batir se incorpora el azúcar (no dejar en contacto directo mucho tiempo el azúcar con las yemas, ya que comenzarán a cuagularse). Batir hasta que espumen, casi hasta que doblen el volumen.
Llevar a baño maría y continuar batiendo. Seguir batiendo hasta que tomen cuerpo y no se vean más rastros de líquido en el fondo. Continuar batiendo hasta que la preparación cambie de tono (se opaque) y se torne espesa.
El chocolate derretirlo a baño maría e integrarlo de forma envolvente al batido de huevos,servirlos en copas de su agrado y enfriar.
Cortar una porción de la torta Némesis y acompañarlo con el untuoso de chocolate y una pequeña porción de budín de pan casero que le aportará un juego de texturas en la boca muy interesante.