Nicolás Catena Zapata marcó, a principio de los años noventa, el camino del nuevo estilo de vinificación en Mendoza. A partir de sus viajes a California, le nació la idea de desafiar y competir con los mejores vinos europeos, tal como lo hicieron los del Valle del Napa con sus Cabernet Sauvignon y Chardonnay. Producir estos grandes vinos argentinos significaría sobrepasar los límites de lo que se venía haciendo hasta ese momento.
En 1992, en un primer intento, la Bodega Catena Zapata decidió cultivar en Gualtallary Alto, a 1.500 msnm, la zona más alta de Tupungato, donde los viñedos se beneficiarían de un clima frío, protegido de las heladas por las montañas circundantes. Estos suelos pobres y pedregosos fueron rechazados por los primeros inmigrantes sin saber que en el futuro se convertirían en un polo vinífero, ya que este combo de altura y suelo calcáreo los emparenta con los terroirs de Borgoña y Champagne.
Importaron los clones de Cahors, Francia. Los de Malbec no tuvieron los resultados esperados, por lo que decidieron crear sus propios clones: los “Catena Cutting”. Sin embargo, esto no sucedió con los clones franceses de Chardonnay, que terminaron dando como resultado un vino blanco de gran elegancia e intensidad aromática, expresión de la tierra y vides de la familia. El vino Angélica Zapata Chardonnay es un vino con historia, y proviene del viñedo Adrianna, considerado Grand Cru de Sudamérica.
Este vino presenta un color amarillo intenso con reflejos verdosos claros. En nariz, un concentrado de aromas a frutas cítricas y el toque mineral característico de los blancos de la Región de Valle de Uco. En boca un sabor dulce, untuoso, brillante y fresco con sabores a frutas maduras, notas de vainilla y una excelente acidez natural que le otorga un final largo y persistente. Tiene paso de 14 meses por barrica de roble francés de primer, segundo y tercer uso. Su paso por madera nos da 5 años de potencial de guarda. Podemos acompañar a este gran vino Chardonnay con postres, quesos y carnes blancas; también con sushi o tomarlo como aperitivo.