1. Con un cuchillo marcar de arriba para abajo la columna del cochinillo por la mitad sin llegar a cortarla del todo
   y no romper su piel.
2. Limpiar bien y salar.
3. Colocar los dientes de ajo a lo largo de la columna, poner la manteca por el cochinillo dejando un poco para añadir
   luego al darlo vuelta.
4. En una asadera, si es posible de barro, poner el laurel y encima el cochinillo con la piel hacia abajo. Si no hay palos de laurel poner otros palos, lo más importante es que el cochinillo no toque con su piel el agua que añadimos al barro.
5. Poner al tatakua o en horno eléctrico a una temperatura de 150ºC por 1 hora y 30 min.
6. Sacar el cochinillo y con mucho cuidado darlo la vuelta sin romperle.
7. Añadir la manteca por encima de su piel y un poco más de agua si no hubiera, subir la temperatura del horno
   a 190ºC por 45 min.
   Debe quedar doradito y crujiente.

Por último: Cortar con un plato y después romper dicho plato según la historia para que traiga suerte.