El kafta o kefta es un plato árabe de carne picada condimentada con especias tradicionales. Originalmente, se cocinaba al horno; hoy en día se cocina en palitos o lanzas sobre brasas o directamente sobre el fuego. Hace algunos años, un amigo de nombre Rodrigo, descendiente de árabes (sirios), me invitó a comer kafta en lo del “tío Afri”. Al preguntarle qué era el kafta, me dio una respuesta que nunca olvidaré y que después cobró mucho sentido: el kafta es “la hamburguesa del árabe”.
1 cdita Mezca de especias árabes (canela, comino, pimienta, cardamomo)
1 cda Sal
2 mazos Perejil fresco
1 mazo Cilantro o menta
1 cda Mantequilla clarificada
2 cdas Aceite virgen
Zumo de 1 limón grande
Paso a paso
Amasar la carne con el perejil, el cilantro, la cebolla, una cucharada de sal, una cucharadita de especias,
el limón y el aceite.
Dejar reposar la preparación por al menos 2 horas en la heladera, si hace mucho calor.
Obs: Hay que tener por lo menos 20 capas. Es importante usar almidón de maíz para estirar la masa.
Porcionar el preparado según los espadines y palitos que tengamos, con ayuda de la palma de la mano moldear como una “croqueta” y luego atravesar con el espadín o el palito.
Pintar con mantequilla o aceite y hacer a las brasas, parrilla o al fuego.
Servir con pan árabe caliente, cuajada y tabouleh, o tzatziki y tabouleh.