Originalmente este plato se prepara con trigo bulgur, hierbas aromáticas, tomate y otros condimentos. Hugo Caballero lo preparó con un superalimento andino reinstalado en el mundo gastronómico por la cocina novoandina: la quinua o quinoa (del quichua, kinuwa), acompañada con porotos, chauchas salteadas y palmito grillado. Un encuentro entre dos culturas distantes de riquísima tradición.