Colocar la sal en un bol grande y mojarla de a poco, hasta que quede bien húmeda.
Colocar la mitad de la sal en la base de una bandeja bien compacta y colocar arriba el pollo. Taparlo con el resto de la sal, por completo, como un bloque de sal.
Llevarlo al tatakua por 1 hora.
Romper el bloque con un martillo y retirar la sal con la ayuda de un pincel.